Configuración Energética

El cuerpo físico, es el conocido por todos. Con él nos identificamos, es el más visible, el más tangible, tridimensional, estamos muy apegados a él, pues creemos que somos él pero podemos aprendiender que no es así. 

El cuerpo emocional, también llamado cuerpo astral o de deseos, es el portador de nuestros sentimientos, de nuestras emociones y de las cualidades de nuestro carácter; ocupa aproximadamente el mismo espacio que el cuerpo físico. Ninguno de los otros cuerpos no materiales marca con tanta fuerza como el cuerpo emocional la visión del mundo y de la realidad pues es el que la interpreta. En el se halla albergada toda nuestra carga emocional, consciente e inconsciente.

El cuerpo mental, formado por un cuerpo mental inferior (cmi) y un cuerpo mental superior (cms). La forma de funcionamiento del cuerpo mental inferior es el intelecto. Este cuerpo, es más sutil que el emocional, nos permite pensar, discriminar, valorar, catalogar, organizar; está relacionado con el pensamiento lineal y con las funciones del hemisferio izquierdo del cerebro. En el cuerpo mental superior, pasamos a una cualidad diferente, se podría decir que a otra dimensión del conocimiento. Su forma de conocimiento es a través de la intuición, esto es conocimiento verdadero, certeza, sabiduría, valores, vision de totalidad. 

La auténtica función del cuerpo mental (en su totalidad) consiste en recoger las verdades universales que le llegan del plano del cuerpo espiritual (a través del cuerpo mental superior) e integrarlas con el entendimiento racional (del cmi), que las transfiere a las situaciones concretas y lleva a una solución del problema en consonancia con las leyes universales. Los conocimientos que de esta forma nos llegan del plano espiritual de nuestro ser se manifiestan como intuición en forma de intuiciones repentinas, a menudo en imágenes o incluso en sonidos que después se transforman en pensamientos verbales. Nos permiten mirar al interior de la auténtica naturaleza de las cosas, al contrario que el entendimiento lineal que parte de la concepción racional.

El cuerpo espiritual, es el que mayor frecuencia de vibración posee de todos los cuerpos energéticos. Del plano espiritual del ser fluye incansablemente la máxima y más radiante energía hacia el cuerpo espiritual. A medida que esta energía va transformándose en frecuencias menores, inunda también el cuerpo mental y el cuerpo emocional. Aumenta las vibraciones de estos cuerpos, de forma que en su ámbito de acción correspondiente pueden encontrar su máxima forma de expresión. Hasta qué punto podamos percibir conscientemente, absorber y aprovechar esta energía depende del desarrollo de los chakras. Sólo a través del cuerpo espiritual es posible conocer la fuente y el destino de nuestra existencia y comprender el auténtico sentido de nuestra vida. Cuando nos abrimos a sus vibraciones nuestra vida cobra una calidad completamente nueva. En todas nuestras acciones somos llevados por nuestro Yo Superior, y nuestra vida manifiesta la sabiduría, la fuerza, la bendición y el amor universal, que representan las cualidades naturales del aspecto supremo de nuestro YO.